¡Verde de Primera!
Deportiva se la juega a lo Francia. Fases y fases. Pierde por dos. Lo que se pierde, también, es la cuenta de puntadas, con o sin hilo. Van los forwards, van los backs. Tremendo empuje. Hurling aguanta. Estoico. Prolijo. Disciplinado. Nada de pasarse de rosca; si no, penal en contra. Y anda a cantarle a Lucas Pierazzoli. Loas para el lungo segunda línea, que entró en el segundo tiempo a bancar la parada. Junto a su hermano Mateo, se la jugó como un loco desquiciado y se tiró de cabeza para taparle el intento de drop a Tomás Casaux, medio-scrum rival. Es cierto, la pelota no le picó como corresponde, pero qué va.
Delirium tremens en la bonita y coqueta cancha 3 de La Plata, la que está de espaldas a la principal. El Verde es de Primera. Verde esperanza. Lo que tanto costó conseguir, una década después, es por segundo año consecutivo una realidad: ser de elite. Llanto y desolación para la Dépor, que, diezmado, la guapeó a morir.
Partido malo. Malísimo. Típico de lo que estaba en juego, nada más y nada menos, que mantenerse en el Grupo I para 2016. Nervios. Tensiones. Imprecisiones. Así y todo, los dos se animaron. Y la emotividad llegó sobre el final. Antes, pocas ideas y mucha fricción, con Hurling sacando una luz de ventaja en el primer tiempo (parcial 11-10).
Andrés Wade fue uno de los más lúcidos al culminar en la bandera izquierda una buena maniobra colectiva. Juanma Quevedo se puso a suma con el pie, aunque a la primera de cambio, y tras una buena obtención en el line, Sebastiano se escapó y descontó para los de Del Viso.
Ni bien comenzado el complemento, Pedrito Roca, no tan efectivo y que luego fallara un penal distante pero frontal determinante, asistió de rastrón a Fede Valdez, quien se dio un gusto por duplicado: try en el día de su cumpleaños, y su equipo en ventaja por primera vez en el match (15-11).
Sin embargo, el banco del Verde se movió mejor. Cada uno que entró, lo hizo en mejor forma que el que salió. Así, Benja García Propato condujo a los suyos a la victoria. Y de dos muy buenas irrupciones, devinieron los penales que Quevedo facturó. A defender con el alma, la vida y el corazón.
Roca se perfiló para la patada de sobrepique. Su pierna izquierda estaba preparada para desatar el festejo de Francesa, pero decidió involucrarse con sus compañeros y la responsabilidad pasó a manos (a los pies, en realidad), de Tommy Casaux. No pudo ser. Bajón para Deportiva. Vuelta a empezar. Para ambos.
Hurling (17) – Juan Manuel Quevedo; Lucas Pereiro, Mateo Pierazzoli, Juan Pablo Rolleri y Joaquín Scally; Paul Wade y Julián Quevedo; Gonzalo Camusio (cap), Julián Pereiro y Federico Pérez Brea; Andrés Wade y Ramiro Paiz; Tomás Abelenda, Rodrigo Donoso y Gabriel Samarco.
Entrenadores – Tom Wade, Tomás Salvagni y Carlos Mohapp.
Final 7° Puesto - 26 de septiembre - La Plata
Hurling Club | 17 | 15 | Dep. Francesa |
Fuente – A Pleno Rugby